A ti Nuestro Dios nos dirigimos,
con todo lo que cada uno somos, vivimos y traemos;
y desde la confianza que tenemos, de tu amor por nosotros.
Por tu Hijo, Jesús, estamos juntos hoy,
haciendo posible un encuentro de hermanos
en comunión y en búsqueda.
Que El nos mueva en nuestro deseo de ser testigos del Evangelio.
Con la fuerza del Espíritu nos animas,
nos alientas y nos haces caminar,
mirando confiadamente hacia lo alto.
Te pedimos por tantos jóvenes comprometidos en la fe.
¡Acompáñales!
Por los que quieren seguirte y tienen dudas o miedos.
¡Confírmales!
Por los que aún no vieron en Jesúsa un Amigo.
¡Háblales!
Que todos reconozcamos en ti, Cristo,
el tesoro que da sentido a nuestras vidas.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario